«Sin crisis no hay méritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia» Albert Einstein.
No hay duda de que el COVID-19 tendrá repercusiones nefastas para nuestra salud mental. Pero pese a las consecuencias negativas de esta odiosa pandemia, también hay impactos positivos relacionados con el aumento del tiempo en familia debido al teletrabajo y al aprendizaje virtual.
Es cierto que muchas familias se han enfrentado a situaciones muy difíciles que han amenazado sus necesidades básicas de seguridad y protección. Sin embargo, la pandemia puede permitir que nuestra resiliencia salga a flote y le muestre a nuestros hijos/as cómo sacar lo mejor, incluso, de las peores situaciones.
Qué de bueno tiene la pandemia
Sabemos que detrás de cada crisis también hay oportunidades, así es que veamos cuáles son los impactos positivos:
Más control del tiempo
El impacto familiar positivo es que los niños tienen más control de su tiempo, lo que les permite administrar más su día. Esto puede motivarlos a que tengan conductas independientes, tales como hacer las tareas y la resolver las peleas entre hermanos cuando los papás están centrados en el trabajo.
Resiliencia familiar
La capacidad de recuperación de la familia se construye mediante la búsqueda de flexibilidad para enfrentar las circunstancias cambiantes, lo que lleva a la cooperación y al fortalecimiento de los lazos familiares. Las familias hemos tenido la oportunidad de pasar más tiempo juntas aumentando el tiempo que pasamos con nuestros hijos.
Más tiempo de descanso
La otra repercusión familiar positiva es que los niños tienen más tiempo para descansar sin tener que viajar a la escuela, el trabajo y las actividades extraescolares. Como resultado, muchos niños tienen tres horas adicionales de sueño. En este punto es importante que como papá o mamá trates la asistencia a la escuela virtual, como si fuera la escuela física. Los niños/as deberían levantarse, ducharse, desayunar y vestirse. Esto es parte del respeto por ellos mismos, por los demás y el intento de mantener una rutina, acción muy importante para la estabilidad de los niños.
Aumento de la autoestima
Involucrar a los niños en el trabajo de la familia aumenta su autoestima y responsabilidad. Los niños de todas las edades deberían tener quehaceres domésticos a su cargo. Aprovechemos de darles a nuestros hijos las habilidades necesarias para manejar cualquier situación que les depare la vida.
Las responsabilidades se les deben asignar de acuerdo a la edad y pueden incluir hacer la cama, guardar la ropa, lavar los platos, barrer y sacar la basura. A medida que los niños crecen, pueden tener más tareas, pero teniendo en cuenta que su prioridad número uno es la educación.
Algunos tips para sacar “lo mejor” de esta pandemia
- Pregúntale a los niños sobre su día.
- Mantén un control del tiempo que ellos pasan frente a la pantalla.
- Incluye a tu hijo en la selección de las actividades diarias. Los niños están mucho más dispuestos a hacer cosas que fueron idea suya.
- No te vuelvas loco/a planificando en exceso
- Haz cumplir el tiempo en familia. Que sea una prioridad tener cenas o noches de juntas familiares.
A medida que se define lo que será la nueva normalidad, es importante darse cuenta de que esta crisis sanitaria supondrá un cambio en nuestras vidas. Por eso es importante continuar con el vínculo familiar y establecer rutinas durante la pandemia, ya que esto ayudará a redefinir de manera positiva la “familia pospandémica”.
Los expertos insisten en que no todo ha sido negativo. Para la psicóloga familiar y docente colaboradora de los Estudios de Psicología y Ciencias de la Educación de la UOC Amalia Gordóvil, la pandemia ha tenidotambién un aspecto positivo y ha propiciado que los»niños sean más pacientes, empáticos y creativos».
¿Qué opinas tú al respecto?¿Qué cosas buenas nos está dejando esta crisis? Te leemos en los comentarios.