Desde que la japonesa Marie Kondo lanzó su libro, «La magia del orden», muchos han seguido su método en la búsqueda de un hogar limpio y de artículos que «despierten alegría»
La “reina del orden” también tiene un libro para niños que tiene por objetivo demostrar que ordenar no es solo una habilidad importante para la vida de los adultos, sino también para los más chicos.
En este libro titulado «Lili y Teo: la magia de la amistad”, Teo le enseña a Lili cómo ordenar usando el sistema “Kondo”.
Al igual que esta famosa japonesa nos ha enseñado a los adultos, los personajes de esta historia tiran todos sus juguetes y ven cuáles son «los que despiertan la alegría”. Luego los clasifican y organizan.
Si bien enseñar a los niños este método puede sonar casi imposible, a ellos les resultará agradable ordenar si los padres también lo encuentran divertido.
Según Marie Kondo, si los niños ven que sus padres disfrutan ordenando, ellos lo percibirán como algo positivo y se animarán a hacerlo también.
Las recomendaciones de la “gurú del orden!
Estos son algunos de los tips de Marie Kondo para que tus hijos aprendan a ser ordenados:
1. Da un ejemplo
Los niños aprenden con el ejemplo. Así que antes que todo, asegúrate de que la casa esté en orden. Si descubres algo que ya no te produce alegría, incluye a tus hij@s en el proceso de agradecer y dejar ir ese artículo.
2. Explica mientras ordenas
Mientras ordenas, explícales a tu hijo o hija lo que estás haciendo para que pueda aprender de ti. Trata de transmitirle el mensaje de que ordenar, es parte de lo que hay que hacer para mantener un hogar cómodo y confortable. Si ven que tú estás feliz ordenando, los niños pensarán que esta es una tarea diaria positiva.
3. Dale a todo“un hogar”
Los juguetes de tu hij@ parecen multiplicarse y casi siempre están dispersos por toda la casa. Asegúrate de que tu niñ@ entienda dónde debe guardarlos. Al devolver los artículos “a sus respectivas casas”, tu hijo desarrollará conciencia y apreciará lo que tiene.
4. Logra que el orden sea parte del juego
Muéstrale a tu hijo o hija que los juegos y ordenar van de la mano. Anímalo a guardar sus juguetes después de usarlos. Así con el tiempo y mucha paciencia, se volverá en un hábito.
5. Respetar las limitaciones espaciales.
Si reconoces que tu espacio es limitado, evitarás que tu hogar sea invadido solo por las pertenencias de tu hijo. No te enojes contig@ mismo si las cosas no siempre se ven como quieres.
6. Mantén todo a la vista y a su altura
Para esta maestra de la organización, es muy importante que de una simple ojeada podamos ver todo lo que tenemos. “Mejor todo a la vista, que esté ordenado y rápido de localizar”. Coloca sus libros y su ropa a su altura. Esta estrategia le dará mayor autonomía al momento de guardar sus cosas, organizar y vestirse.
En sus dormitorios usa muebles bajos o elige un armario para niñ@s. Si es empotrado, puedes colocar una barra en la parte de abajo para que cuelgue su ropa.
Instala percheros a su altura para que puedan colgar su abrigo y bolso. Así no tendrás que preocuparte de que las tiren en el suelo o en los sillones.
Los especialistas recomiendan que si quieres usar este método de orden con tu hij@, leas primero el libro a solas y evalúa que podría funcionar y qué no, con tu niñ@.
Nosotros te recomendamos que te armes de paciencia, porque el orden, como cualquier hábito, se adquiere con repetición y altas dosis de perseverancia. Incluso hasta la misma Marie Kondo, confesó que ordenar se le había vuelto más difícil en el momento que nació su segunda hija.
Así es que ya sabes, ten paciencia contigo mism@ y con tu hij@.